En Canarias se habla español, pero el acento de sus gentes se asemeja más al del Caribe o los países sudamericanos que al de la España peninsular. Los canarios usan muchísimas palabras que dan fe de los lazos que unieron las islas y los estados caribeños gracias al trasiego de emigrantes.
En Canarias normalmente se acortan ciertas palabras y no se suele pronunciar la “s” final, lo que puede resultar algo confuso para el oído poco habituado. Además, es de destacar que la “c” antes de “i” o “e” se pronuncia como una “s”. Asimismo, han sobrevivido numerosos términos guanches, especialmente en topónimos, que empiezan a menudo por “gua-”.